La 'inquiokupación' y las nuevas leyes: los motivos por los que 2.000 casas de Cáceres están cerradas

«No hay que incentivar a los propietarios de las viviendas de Cáceres que están cerradas. No. Lo que hay que hacer es protegerlos». Así de contundente se muestra el presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Cáceres, Francisco Marroquín, sobre las 2.000 casas que están vacías en la ciudad. Los principales motivos que apunta para que esta cuestión se haya agravado en la capital provincial en los últimos años, agudizando la crisis de vivienda, son la inquiokupación y las nuevas leyes.

Desprotección

«Los dueños de pisos están totalmente desprotegidos en comparación con los inquilinos. Las últimas leyes de vivienda que se han aprobado desde el año 2019 deberían ser derogadas por completo para que este problema se solucionase», señala Marroquín. «Mi opinión no es la que cuenta. Los que tienen que solucionarlo son los políticos», asegura.

Inseguridad en el mercado

La cuestión, según precisa Marroquín, es que estos últimos reglamentos, que considera «perjudiciales», habrían «creado una gran inseguridad en el mercado porque atacan radicalmente a los propietarios, mientras que favorece al arrendador». «La gente nos dice ‘¿por qué voy a alquilar? Prefiero que esté cerrada’ por la inseguridad jurídica que hay en la actualidad. Un contrato se rige siempre por el equilibrio entre los derechos de una parte y otra. Pero actualmente el único que los tiene es el inquilino. Así de claro», explica Marroquín, que justifica los motivos por los que los propietarios prefieren no entrar en el mercado del alquiler.

Incentivos

En la reunión que mantuvieron este martes la presidenta del Círculo Empresarial Cacereño, Ana Fernández Villegas, y el alcalde de Cáceres, Rafa Mateos, donde se puso sobre la mesa el dato de las 2.000 casas cerradas, se propuso también la posibilidad de incentivar de alguna forma a los propietarios. Esto se podría realizar a través de rebajas fiscales, por ejemplo. 

Derogar normativas

Sin embargo, Marroquín considera que «no sería la solución para que decidiesen abrir sus casas, puesto que no disminuiría el coste del alquiler e inflaría el precio de la vivienda y la carga impositiva. Lo que hay que hacer es proteger al propietario», reitera Marroquín, que insiste en la importancia de derogar todas las normativas de vivienda desde 2019. «Además, está repercutiendo en la compra-venta, que ha sufrido un rebote en los precios», sentencia.

«En un contrato de alquiler actual, solo tiene derechos el inquilino»

Francisco Marroquín

— Presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Cáceres

Y por otro lado está el asunto de la inquiokupación, que se produce cuando un individuo que inicialmente obtuvo legítimo a una propiedad a través de un contrato de alquiler, deja de cumplir con el pago de la renta acordada.

Jacinta Sánchez

Una de las personas que mejor conocen el mercado de la vivienda en la ciudad es Jacinta Sánchez Fragoso, de la Inmobiliaria Cáceres, que ya tiene unos 27 años de existencia. Coincide en el grave problema de las casas cerradas con Marroquín, pero señala que «2.000 me parecen muchas, no creo que haya tantas». Cuenta con unos 25 pisos en alquiler y asegura que nunca ha sufrido el problema de la inquiokupación por la selección que hace de sus inquilinos: «Primero pido una nómina, y después pregunto a otras personas por ellos. Y con la gente que viene de fuera, igual. No he tenido nunca ningún problema». En lo que comparte opinión con otras inmobiliarias es en la inseguridad jurídica que tienen los propietarios a la hora de alquilar sus viviendas. 

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