Cultura

Christian Magritte celebra sus 15 años de amor a la magia y a Badajoz

Este mago repasa su trayectoria artística y asegura que ha "aprendido más de los errores que de los aplausos"

Christian Magritte.

Christian Magritte. / CEDIDA

Irene Rangel

Irene Rangel

Badajoz

Christian Magritte está de aniversario: cumple 15 años de profesión. Él, fiel a sus principios de amor a su profesión y su ciudad, ha actuado en los mejores lugares del mundo y también en los más humildes actos de Badajoz. Su trabajo le ha llevado hasta Nueva York y París. Aun así, recuerda la del López de Ayala como la mejor actuación de su vida.

– 15 años de profesión. Enhorabuena. ¿Cómo se siente?

Agradecido. No solo por haber llegado hasta aquí, sino por todo lo que la magia me ha regalado durante este viaje. Gracias a esta profesión he podido conocer a personas que marcaron mi infancia, como Juan Tamariz o David Copperfield.

– ¿Cómo recuerda sus inicios?

Empecé de manera profesional en el mundo de la magia cuando tenía 20 años, y en aquel momento me faltaban tablas en el escenario y formación empresarial. Así que fui aprendiendo sobre la marcha y equivocándome muchísimas veces. Pero lo bueno de los errores y los fracasos es que te capacitan para sacar la mejor versión de ti mismo y posicionarte en el mercado.

– ¿Cómo definiría su trayectoria artística?

Siempre he buscado la autenticidad y la innovación. Desde el primer día decidí que la magia no solamente debía entretener, sino emocionar, conectar y dejar huella en el espectador. Por eso siempre he intentado aprender más de los errores que de los aplausos y formarme constantemente para ofrecerle al público espectáculos mágicos y con calidad.

– ¿Cómo han sido estos años?

Emprendí por vocación y no por necesidad, y eso me ayudó mucho. Aun así, han sido años de esfuerzo, preparación y muchas horas de ensayo. El secreto para mantenerse en pie está en ponerle cariño a lo que haces y en aprender a gestionar la frustración.

– Usted siempre ha vivido en su ciudad. ¿Por qué no se fue fuera a buscar oportunidades?

Como dice El Alquimista, la búsqueda de nuestra leyenda personal no siempre nos lleva lejos, a veces nos lleva más profundo. Y eso fue lo que hice: apostar por crecer aquí y contribuir al desarrollo de la ciudad. Pero eso no significa que no haya salido al mundo. En estos 15 años he recorrido todo el país con mis espectáculos, y he tenido el privilegio de llevar mi magia a ciudades como Nueva York y París.

– ¿Cree que los jóvenes son quienes impulsan una ciudad?

Sin duda. Los jóvenes aportan energía, creatividad y nuevas ideas. Es fundamental brindarles oportunidades y espacios para que puedan desarrollarse y contribuir al crecimiento de la ciudad. Nos encontramos en una etapa de grandes cambios tecnológicos, es natural que la lideren los jóvenes.

– ¿Qué le ha aportado Badajoz en su carrera?

Badajoz me ha dado identidad, valores y acento. Y, por supuesto, libertad.

– ¿Cómo es la vida de un mago?

Es una vida silenciosa por fuera… pero inmensamente ruidosa por dentro. Cada número que el público ve en tres minutos, a veces lleva años gestándose en la soledad de una habitación. La magia me ha enseñado a valorar los detalles y a cuidar de los míos de forma más consciente y presente.

– En todos estos años, ¿qué momentos guarda con más fuerza?

Actuar en Nueva York fue inolvidable. También ver el teatro López de Ayala lleno con mi primer espectáculo, El Sabor de la Magia, fue algo especial. Pensé “esto empezó como un sueño…y hoy está pasando de verdad”.

– ¿Cómo está celebrando estos 15 años de trayectoria?

Lo estoy celebrando como empezó todo: sobre el escenario y rodeado de los míos. Quiero dar las gracias en forma de magia a quienes han estado ahí desde el principio.

– ¿Qué sueños le quedan por cumplir?

Seguir llevando la magia a nuevos escenarios, colaborar con artistas de diferentes disciplinas y continuar inspirando a las nuevas generaciones.

Tracking Pixel Contents