Los médicos extremeños claman en su jornada de huelga: “Batas al suelo, nos vamos al extranjero”

Alrededor de medio millar de médicos extremeños se han movilizado este viernes en el marco de la huelga convocada a nivel nacional para exigir mejoras laborales y un estatuto propio para el colectivo médico. Bajo consignas como “batas al suelo, nos vamos al extranjero”, los facultativos han expresado su rechazo al borrador del nuevo Estatuto Marco —que regula las condiciones del personal sanitario— publicado recientemente por el Ministerio de Sanidad.

Disparidad en el seguimiento y protesta en las calles

La precariedad laboral, la sobrecarga asistencial y la falta de estabilidad en el sistema público han marcado la jornada, que según el Sindicato Médico de Extremadura (Simex) ha tenido un seguimiento del 77%, mientras que la Junta de Extremadura lo ha cifrado en el 32%. Unos doscientos profesionales se han concentrado frente a la Delegación del Gobierno en Badajoz y una cifra similar lo ha hecho ante la Subdelegación de Cáceres, donde se han mostrado decenas de pancartas con lemas como “el Estatuto Marco nos lo pasamos por el arco” o “esto es vocación, no explotación”.

Las imágenes de la protesta de médicos en Cáceres

Ana Rosa Domínguez, médica en la unidad de Hematología del Hospital San Pedro de Alcántara en Cáceres, se ha referido precisamente a las jornadas de trabajo: “Nos obligan a hacer guardias de 17 horas, que en realidad son 24 con suerte y no siento que nos paguen acorde a lo que hacemos”. Sin embargo, los médicos insisten en que no reclaman mejoras salariales, sino unas condiciones que les permitan ejercer con calidad. Domínguez, de 25 años, lamenta que “no se reconocen los años estudiados” y que, pese a ser una profesión vocacional, requiere respaldo y garantías laborales.

El cansancio compromete la atención

A su lado, Irene Gómez, especialista en Medicina Interna en el mismo hospital, ha recordado un caso grave que tuvo de madrugada en el que no pudo realizar un diagnóstico porque estaba “tan cansada, tan fatigada” que no fue capaz. Por ello, considera imprescindible garantizar una atención de mayor calidad.

Para ella, el Estatuto Marco presentado por el Ministerio “empeora, incluso, las condiciones de las guardias y disminuye los derechos porque las horas de descanso pueden verse condicionadas por las necesidades asistenciales. Entonces, si algún día falta personal y acabas de salir de una guardia o has hecho un turno largo, podrías volver a trabajar”.

La experiencia de Javier Rivas, ginecólogo en el San Pedro de Alcántara, va en la misma línea. Defiende que lo único que están reclamando es más tiempo libre: "Pedimos no tener que cubrir los puestos que faltan y que el tiempo que trabajamos en las guardias se nos contabilice para que podamos tener una jubilación adecuada”. También denuncia la sobrecarga a la que están sometidos, especialmente en los periodos vacacionales, cuando no se sustituyen las ausencias.

A su juicio, la propuesta de reforma que plantea el Gobierno “está diseñado para maquillar un poquito la situación", pero las reivindicaciones "no están cubiertas".

“Esto no va de sindicatos, va de profesión”

En representación del área de Navalmoral, José Ignacio Prieto, médico de familia y delegado de Simex, ha calificado la situación actual de "persecución", criticando que se igualen las condiciones sin tener en cuenta la formación requerida: “Una enfermera a los cuatro años sale y puede trabajar en el Sistema Nacional de Salud. Nosotros tenemos que hacer 6 años de Medicina y luego cuatro o cinco de MIR”.

Por eso, Prieto se ha referido a la necesidad de que haya médicos en la mesa de negociación, puesto que “la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha nombrado un enfermero, Comisiones Obreras otro enfermero, la UGT otro enfermero, pero solo hay un médico que tiene voz y nisiquiera tiene voto” y ha asegurado que “desde 2010, en toda España, una enfermera cobra más extraordinarias que un médico”, subrayando, al igual que el reto de facultuativos presentes en la manifestación, que las guardias obligatorias no computen para la jubilación.

El delegado del Simex en Navalmoral asegura que esta reforma “nos hunde a todos. A los pacientes lo primero, porque nosotros también somos pacientes”.

Desde el plano institucional, la Secretaria General del Simex, María José Rodríguez Villalón, ha recalcado que aunque el paro nacional es siempre la última opción, la convocatoria es necesaria para mostrarle al Ministerio que la profesión médica ha dicho: ‘Basta’”. Ha calificado de “atropello” el borrador del Estatuto Marco y ha lamentado que, pese a haber acudido a las reuniones “de buena fe”, el Ministerio ha insistido en mantener un texto que “discrimina” a los médicos.

Villalón ha añadido que “la propuesta del Ministerio pretende ir hipotecando las condiciones laborales durante décadas", al ritmo que los manifestantes voceaban "esto es votación, no sumisión" y ha lanzado un mensaje a la Ministra de Sanidad, Mónica García: “Queremos decirle que esto no va de sindicatos, esto va de profesión”, ha concluido.

Apoyo desde los hospitales y denuncias de pacientes

Algunos médicos han mostrado su apoyo de forma tácita, por estar cumpliendo con los servicios médicos mínimos en los hospitales. Es el caso de Evelio Robles Agüero, presidente del Colegio de Médicos de Cáceres (Comeca) ha expresado que se trata de un día importante e histórico" en el que "toda la profesión médica está unida contra el Estatuto Marco" y ha mostrado su apoyo a estas reivindicaciones laborales, declarando que "los derechos ni se otorgan ni se mendigan, se reclaman y se luchan".

Mientras tanto, en los centros de salud de la capital cacereña consultados por este diario, el ambiente era tranquilo y funcionaba con aparente normalidad, si bien algunos pacientes han sido desplazados a hospitales con servicios de urgencias. No obstante, algunos s han denunciado que pacientes con cáncer avanzado no han podido realizarse las pruebas programadas ante la falta de personal.